La investigación “Salud mental en madres en el periodo perinatal”, arrojó la prevalencia de síntomas de ansiedad durante el tercer trimestre de gestación y a los 3 y 6 meses postparto en el 43,3% de las madres encuestadas (universo de 158), las cuales se atendieron en el sistema de salud público de las ciudades de Santiago y Concepción.

El estudio realizado por Soledad Coo, Andrea Mira, María Ignacia García, Paulina Zamudio, todas de la Facultad de Psicología de la Universidad del Desarrollo, tuvo como fin detectar sintomatología ansiosa y depresiva durante el embarazo y sus impactos.

Con relación a la depresión, entre el 13,9% y 20,9% de las mujeres presentaron sintomatología depresiva durante el tercer trimestre de embarazo y a los 6 meses postparto, respectivamente.

Según cuenta Soledad Coo, los síntomas de salud mental durante el periodo perinatal son comunes y tienen consecuencias negativas tanto para la madre y como para el resto del núcleo familiar, agregando que muchas veces estas señales son invisibilizadas por desconocimiento y el estigma que hay en la sociedad sobre ellos.

“Altos niveles de ansiedad se asocian a mayor riesgo de tener bebés con menor edad gestacional al momento de nacer. La sintomatología depresiva en el embarazo es, además, un factor de riesgo para la lactancia, ya que las madres deprimidas desde el embarazo tienen mayor riesgo de introducir fórmula más temprano y de interrumpir la lactancia más temprano que madres sin sintomatología”, destaca Coo.

Uno de los resultados que más llamó la atención de las investigadoras fue que las mujeres que están más acompañadas por su pareja o por su mamá, presentan menos sintomatología que las madres que aseguran estar menos apoyadas.

La investigación apunta que para evitar que aparezcan síntomas de ansiedad y depresión, es fundamental visibilizar los problemas de salud mental materna para que sean tratadas a tiempo. Además, es primordial generar ambientes protectores y recibir el apoyo de los más cercanos.