“Si quieres triunfar debes de estar dispuesto a fracasar mil veces y a perder todo lo que has conseguido. Y no temas perderlo todo, pues si te lo has ganado bien, de seguro lo recuperas con creces”. La afirmación es del abogado y empresario Felipe Cubillos, quien se reunió con cerca de 150 alumnos de la Universidad de Desarrollo, en el marco del ciclo de charlas «Bachillerato, una ventana al Pensamiento», organizadas por Bachillerato de la Facultad de Educación y Humanidades.

Cubillos ha destacado el ultimo año por la inmensa labor que ha realizado en la reconstrucción de zonas afectadas por el terremoto del 27F, al frente del proyecto “Desafío, Levantemos Chile”. Junto a un equipo de 60 profesionales voluntarios, han logrado construir más de 20 escuelas y reparar más de 400 embarcaciones con los pescadores afectados.

Durante su intervención en la UDD, el empresario narró a los estudiantes su participación en la regata de la vuelta al mundo en un yate el 2009 -durante 146 días-, y cómo las experiencias vividas le sirvieron para construir equipos, desarrollar proyectos y sacar adelante a mucha gente que había perdido todo.

“Cuando creas que no es posible, que ya no puedes más, date un tiempo para ver las estrellas y espera despierto el amanecer; ahí descubrirás que siempre sale el sol, siempre!”, enfatizó el empresario quien explicó que trabajar en equipo y ser cercanos a la gente, ha sido fundamental para los logros conseguidos.

Cubillos entregó una serie de recomendaciones a los alumnos, para tener presentes en sus experiencias emprendedoras:

Acerca de los límites, ellos no existen o están mucho mas allá de lo que te imaginas. Cuanto mas allá? Ese es la pregunta, tienes que llevarte al extremo y ahí lo descubrirás.

El talento no sirve para nada si no va acompañado de determinación, planificación, disciplina y perseverancia. El talento es efimero, la determinacion, eterna!

Ayuda a los que son igual o más capaces que tú, pero que no han tenido tus mismas oportunidades. Son ellos los más olvidados de la sociedad pues siempre se ayuda a los que piden y vociferan, pero a los que me refiero, no piden ayuda, sólo necesitan una oportunidad.

Acerca del éxito y el fracaso, reconócelos como dos impostores, pero aprende sobre todo de los fracasos, los propios y los de los demás. Ahí hay demasiado conocimiento, que generalmente no usamos.

Sobre los amigos, elije los que están contigo cuando estás en el suelo, porque cuando estés en la gloria, te van a sobrar.