Hero Image

Noticias

Guili Rosen y Josefina Alcaino: Del hobby al emprendimiento de reciclar y restaurar muebles

Guili Rosen y Josefina Alcaino se conocieron mientras estudiaban Diseño en la UDD. Con los años, forjaron una fuerte amistad sin saber que tiempo más tarde se convertirían en socias fundadoras de un consolidado emprendimiento llamado “Violette Studio”, el cual consiste en reciclar y restaurar muebles, asesorías de interiorismo y también en la venta de kits de tutoriales para hacer restauraciones en casa. 

Según contaron, en el año 2019 ambas se encontraban realizando sus propios proyectos. Josefina viviendo en Francia como trabajadora independiente y haciendo restauraciones de muebles en sus ratos libres, mientras que Guili trabajando en un estudio de arquitectura, en Santiago. Hasta que surgió la idea de hacer algo en conjunto. “Yo viví mucho tiempo en Francia -cuenta Josefina- y al volver a Chile me tenía que traer mis cosas en containers, así que decidí aprovechar la oportunidad y traer muebles de allá, que los compré en mercados y ferias, para así poder restaurarlos junto a Guili. Esto fue como un experimento que hicimos”. 

Así fue como empezaron con este emprendimiento, que en un principio se iba a tratar de un hobby, pero que no tardó en crecer y se transformó en su trabajo a tiempo completo. “Me interesó mucho la idea. Todo se fue dando, nos trajimos los muebles y empezamos a trabajarlos de a poco en nuestras tardes libres. Fue en ese minuto en que decidimos hacernos un Instagram y al momento en que subimos las primeras fotos, la gente nos empezó a preguntar. Primero sobre los  productos que estaban en la red social y después nos pidieron restaurar cosas que ellos ya tenían. Nos contaban que habían heredado muebles de la abuela o de familiares y no les gustaban, pero tenían mucho valor sentimental como para botarlos. Fue ahí donde descubrimos que había un nicho muy grande para trabajar y que nadie lo estaba haciendo. Hay muchos muebles antiguos que están a la espera de ser renovados y el valor histórico y sentimental que tienen es impresionante. Ahí fue cuando a ‘la Jose’ se le ocurrió que hiciéramos esto a tiempo completo, como un trabajo. Así que nos atrevimos, yo renuncié al estudio donde estaba y nos lanzamos”, comenta Guili Rosen, alumni de Diseño. 

El valor de restaurar 

Cuando Guili y Josefina comenzaron con este emprendimiento, querían generar conciencia sobre la contaminación y reutilizar lo que ya se tiene, además de valorar lo antiguo y lo que lleva generaciones en una familia. Josefina reafirma que “lo que nos pasó a nosotras, es que vimos que la gente no valoraba lo que tenía y lo que había pertenecido a su pasado y al de sus familias. Siempre estaba como  ‘heredé esto de mi abuela, no me gusta, pero me da pena botarlo’, por lo que con la restauración podían conservar las antigüedades, pero convertidas en algo que les gustara o que fuera con su estilo”. 

Guili agrega: “uno de nuestros objetivos también fue el tema del reciclaje, con Josefa queríamos meternos en esa onda, medio ambiente, reciclaje, el amor a los muebles, la madera. Unimos todo lo que amamos y formamos nuestro emprendimiento. La verdad es que ha sido duro, pero hermoso. Armamos nuestro taller y todo”. 

La importancia de su formación 

Rosen y Alcaino destacan los pilares que les entregó la Universidad del Desarrollo y que les permitió emprender. “Cuando estábamos estudiando teníamos un amplio taller de herramientas y ahí aprendimos mucho porque eso nos ayudó a hacer hoy en día las restauraciones por nosotras mismas”, recuerda Guili. “La disciplina de no parar, de organizarse en las entregas y de conocer tus tiempos para ver cuánto destinas a cada cosa. Además de poner atención a los detalles, el oficio, también fue una buena enseñanza de la UDD”, asegura Josefina. 

¿Tuvieron la posibilidad de hacer algún taller de emprendimiento?

G.R: Yo hice mi título en el dLab y ahí agarré el vuelo para poder emprender. Antes de eso yo pensaba “sales de la universidad, entras a un estudio y listo”, pero el dLab me ayudó muchísimo a todo lo que es emprendimiento. 

J.A: La Universidad también nos enseñó a no quedarnos en la zona de confort y hoy en día no nos quedamos quietas. Eso siempre ha traído sus frutos. 

G.R: Otro punto que me gustaría destacar es que a nosotras nos marcó mucho cuando se realizaban charlas y traían gente que había emprendido o que participaron de concursos nacionales e internacionales, gente que nosotras terminamos viendo como referentes. Era muy motivador escucharlos y escucharlas, que compartieran su historia de cómo habían empezado, su experiencia. También rescatamos que desde la UDD nos invitaron a participar en diferentes concursos de diseño y emprendimiento. 

Tres ejes

“Con el paso del tiempo nos dimos cuenta que la gente no solo nos quería encargar las restauraciones de sus muebles, sino también aprender lo que nosotras hacíamos. Siempre fuimos muy abiertas a compartir la información cuando nos preguntaban y fue así como se nos ocurrió lanzar nuestro kit de lavado de madera. Fue una especie de “hazlo tú mismo”.  

Actualmente “Violette Studio” cuenta con tres áreas a las que los clientes pueden acceder:  reciclaje de muebles y restauración; asesorías de interiorismo y venta de kits de tutoriales y talleres.