Liga de los Indestructibles: Docente UDD escribe cuento infantil para contrarrestar la ecoangustia
“Liga de los Indestructibles” es el título de una serie de cuentos para educar de manera lúdica a niños de entre 6 y 11 años sobre animales extremófilos, los cuales son capaces de sobrevivir en las zonas más inhóspitas del planeta. La encargada de escribir estas historias es María Eugenia Riveros, profesora asistente del Centro de Fisiología Celular e Integrativa de la Facultad de Medicina Clínica Alemana de la Universidad del Desarrollo.
La Ranita de Madera: Super-viviente del Frío, es el nombre del primer cuento, que fue presentado en abril pasado y se encuentra en librerías. “En esta historia, tenemos a una ranita que soporta el frío extremo; de hecho, ella puede congelar el 70% de su cuerpo, y después descongelarse en la primavera y seguir viviendo. Así hay animales que aguantan, temperaturas súper altas, falta de oxígeno o de alimento. La idea en general es mostrar estos animales súper resistentes y explicar que, si bien el ecosistema es frágil y está en peligro, también la vida es poderosa”, detalla Riveros.
Según cuenta la licenciada en Ciencia Biológicas, lo que la motivó a embarcarse en este proyecto -al que fue invitada debido a su trayectoria académica- fue que los niños pudieran conocer a estos animales para que entiendan de mejor manera los problemas que puede generar el calentamiento global y así contrarrestar la ecoangustia, sensación de preocupación por las consecuencias del cambio climático y la fragilidad del ecosistema y que por lo que ha visto entre sus cercanos, es algo que cada vez se está haciendo más común. “Los niños sienten temor por las distintas cosas que escuchan sobre los problemas del entorno natural y muchas veces se lo pueden tomar personal. Por eso nadie quiere niños angustiados, todos queremos que estén felices”, aclara.
La propuesta original de Liebre -editorial de la publicación- era que la docente se encargara de la investigación de los animales extremófilos que forman parte de la Liga, sin embargo, vieron sus cualidades para enseñar y le ofrecieron ser escritora. Una de las cosas que le ayudó a traspasar su conocimiento científico a un cuento para niños, fue la práctica que tuvo con su hijo, ya que ella le explicaba distintos experimentos de manera didáctica. A eso se suman sus casi 10 años de impartir clases en la UDD.
Riveros expresa que un elemento clave que complementa la escritura de La Ranita de Madera es la ilustración. Esto, es un aspecto fundamental porque a los niños les tiene que llamar la atención lo que complementa del texto. En este sentido, la investigadora toma el rol de asesora de los ilustradores. “En los libros infantiles, el dibujo es casi más importante que el texto”, agregando que al ver finalizada su primera obra fue algo maravilloso. “Sentí que era como un experimento, donde uno no sabe qué va a pasar y de repente te sorprende”, enfatiza.
Cabe destacar que el cuento fue presentado en abril de este año en Chile, oportunidad en la que la académica pudo interactuar y responder preguntas de los niños. “Sentir que uno puede impactar desde la ciencia en un niño es algo emocionante”, recuerda. Debido al éxito que tuvo en dicha instancia, la editorial decidió presentar la publicación en la feria de literatura infantil más grande del mundo que se realiza en Bolonia, Italia.
Hoy María Eugenia Riveros se encuentra en la elaboración del segundo cuento, que por temas editoriales debe guardar el secreto sobre qué trata. Y, según cuenta, podrían venir otras cuatro nuevas historias de animales, ya que lo importante es “trasmitir la ciencia y no dejarla encerrada en los círculos académicos”, concluye.