Los desafíos de la nueva “Unidad de Cumplimiento”
La Facultad de Gobierno organizó un panel para analizar las funciones que desarrollará esta entidad, conocida hasta ahora como Delivery Unit.
El director de la División de Coordinación Interministerial del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, Claudio Seebach, aseguró que la creación de la “Unidad Presidencial de Gestión de Cumplimiento” -conocida hasta ahora como Delivery Unit- subirá los estándares en términos de cumplimiento de la gestión de las políticas públicas planteadas por el Estado, al igual como sucedió con la Ley de Transparencia, que motivó un cambio cultural e irreversible a nivel de las exigencias de la ciudadanía en esta materia.
En el taller de discusión “Delivery Unit: Quién define y quién evalúa las metas en el Estado chileno”, organizado por la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo en conjunto con CIEPLAN, Seebach se refirió al proyecto de modernización del Estado que se planteó el gobierno de Sebastián Piñera, destacando los objetivos centrales que se persiguen con la puesta en marcha de la mencionada Unidad de Cumplimiento.
En este sentido, explicó que esta nueva institución se enfocará en un conjunto de prioridades relacionadas con las metas que el Presidente estableció en su discurso del 21 de mayo, vinculadas a los siete ejes de acción fijados: crecimiento, empleo, seguridad ciudadana, educación, salud, pobreza y calidad democracia. La tarea de la unidad será ayudar a los ministerios en la definición de las metas, establecer las métricas para medir los resultados y hacer el seguimiento para que se cumplan.
“Tal como sucede con la entrega a domicilio de las pizzas, lo que se busca aquí es que las metas se cumplan en el tiempo establecido y creo que el mejor ejemplo de esto hasta ahora fue cuando el Ministro Lavín dijo que el 26 de abril todos los niños de Chile estarían en clases, el se fijó una meta y un plazo, y luego las acciones para lograrla y ello se cumplió”, enfatizó el personero de Gobierno.
Junto a Seebach, participaron también en el panel el Investigador Senior de CIEPLAN, Francisco Díaz y el diputado (UDI) Ernesto Silva Méndez. El primero, señaló que es importante definir claramente lo que se persigue al crear una unidad de este tipo, sin copiar los modelos de administraciones anteriores “como la Segpres de Boeninger ” o “el ministerio del Interior de Insulza”. Para él, el problema de fondo tiene que ver con la necesidad de tener “una mejor Moneda”, mucho más eficiente de lo que ha sido hasta ahora y eso implica reordenar los ministerios que subsisten en su interior y los roles que cumplen.
Silva, por su parte, resaltó la importancia de darle un marco institucional a una entidad como esta, en la idea de que trascienda más allá de un gobierno y que no dependa de la impronta o el sello de un presidente para que el Estado logre sus metas.
El diputado y académico de la Facultad de Gobierno de la UDD alabó la iniciativa pero puso algunas alertas sobre los puntos en los que hay que considerar a la hora de diseñar la estructura de esta unidad. Advirtió que será difícil que cambie el comportamiento de los funcionarios y que se produzca un cambio cultural, sino se modifican los incentivos, enfatizando que “algo tiene que pasar si se cumplen o no las metas fijadas”.