Con la participación de destacados políticos del ámbito nacional se llevó a cabo el seminario “Hacia dónde van la derecha y la izquierda en Chile”, actividad organizada por la Facultad de Gobierno. Su decano, Eugenio Guzmán, fue el encargado de dar la bienvenida refiriéndose a la importancia de dialogar sobre este tema, más después del colapso de ideologías que hoy conviven en nuestro país. “La posmodernidad trae una serie de tendencias que interpretamos como anti políticas, sin embargo, ésta es una actividad noble, la única común a todos”, explicó.

El evento comenzó con el panel “Hacia dónde va la derecha en Chile” moderado por Rodrigo Arellano, vicedecano de la Facultad de Gobierno, e integrado por Luz Poblete, secretaria general de Evópoli; Jaime Bellolio, diputado UDI; y Mario Desbordes, presidente de RN.

Luz Poblete expuso sobre los ejes que debiese tener la nueva derecha, destacando la coherencia de sus discursos, la consistencia interna y la moderación. Por su parte, Jaime Bellolio planteó la pregunta ¿hacia dónde y para qué? con énfasis en que la centroderecha debiese tener como prioridad la dignidad humana, la defensa a la libertad y el entendimiento del futuro, especialmente por el efecto que tendrán los nuevos empleos sobre la clase media. Mario Desbordes, en tanto, se refirió a la “inexistencia de una única derecha”, pues hoy conviven diferentes vertientes. “Nos ha costado entender que lo colectivo es más importante que lo individual y que nuestro adversario es la abstención”, dijo. Relacionado a ello, ante una próxima elección presidencial, afirmó que el “candidato de derecha debe salir de primarias. Independiente del partido, contará con nuestro apoyo”.

El panel “Hacia dónde va la izquierda en Chile”, estuvo integrado por Osvaldo Andrade, ex presidente del PS; Fuad Chahín, presidente de la DC; Gloria de la Fuente, presidenta de la Fundación Chile 21 y docente UDD; y Pablo Vidal, diputado de Revolución Democrática. A cargo de la moderación estuvo Gonzalo Müller, director del Centro de Políticas Públicas de la UDD, quien comenzó bromeando con la frase “No sabíamos si invitar a Fuad Chahín al panel de izquierda o el de derecha”. Así, el presidente de la DC inició su intervención, destacando que el clivaje tradicional quedó en el pasado y no representa a los nuevos ciudadanos movidos por causas e intereses. “Hoy hay desconfianza ante el Congreso, lo que es caldo de cultivo para los populismos de izquierda que muchas veces creen que se puede progresar sin esfuerzo y crecimiento, poniendo el foco en cómo distribuimos y no en cómo generamos riquezas”, planteó.

Opinión que fue contrarrestada por Vidal “Fuad habló de esta idea de pensar en prosperidad sin esfuerzo y no quiero decir que me sienta aludido ni que él haya tratado de decir que esos somos nosotros, pero tengo la impresión de que todavía no tenemos una manifestación explícita de populismo de izquierda en Chile, al menos yo no conozco a nadie en el Frente Amplio que crea que Chile se va a desarrollar y crecer sin tener que hacer un esfuerzo”, explicó.

Por su parte, Osvaldo Andrade hizo una retrospectiva del PS, aludiendo a que “no hay que avergonzarse del pasado, pues fue un periodo de la historia con balance positivo (…) creemos que la izquierda debe reconocer un rol más activo del Estado como orientador del desarrollo”, e invitó a Revolución Democrática a acercarse al PS y al PPD. A lo que Vidal respondió “¿nosotros debemos acercarnos a la historia y la tradición o ustedes a lo que nosotros proponemos en base al futuro?”.

El momento más tenso de la jornada estuvo marcado por la pregunta del público ¿el Frente Amplio (FA) podría llegar a liderar una unión de partidos que vaya desde la DC al FA?, a lo que Chahín respondió: “Hoy tenemos muchas diferencias. La verdad es que no conozco muchas propuestas del FA, veo mucha crítica y un buen diagnóstico. Cuando se te acusa o descalifica por pensar distinto, inmediatamente hay una actitud autoritaria. Si piensas diferente al FA eres un traidor, un enemigo y eso hace difícil la convivencia”.

“Él dice que no conoce ninguna propuesta del Frente Amplio, y creo que hay una carga de caricatura y soberbia brutal”, sostuvo Vidal, acusando que “si no nos reconocemos unos a otros como igualmente actores posibles de dialogar, es difícil hacerlo”, concluyó.