Alumni de Psicología UDD aplica nuevas herramientas en Salud Mental aprendidas en su práctica profesional en EE.UU.
Corría el año 2019 y Magdalena Blaitt estaba cursando su quinto año de la carrera de Psicología en la Universidad del Desarrollo, por lo que tenía que tomar la decisión de dónde realizar la práctica profesional. Un día de abril, mientras estaba en una sala de clases, se enteró que gracias a un convenio que tenía la UDD con la Universidad de Denver de Estados Unidos, existía la opción de hacerla en dicho país en un periodo de seis meses. “Fue algo que surgió. No fue algo que pude pensar mucho y proyectarlo”, ya que en mayo comenzó con los trámites y en agosto tomó sus maletas para vivir una experiencia que le cambió la vida.
Al principio, las cosas no fueron fáciles debido a que era la primera vez que salía de su casa y que estaba lejos de su familia por un periodo tan largo, a lo que se le sumaron los desafíos del idioma y el clima, ya que en invierno la temperatura en Denver puede llegar fácilmente a los -17 grados. Pero al poco tiempo fueron mejorando, ya que estaba acompañada por otras dos compañeras de la Universidad y también, durante los dos primeros meses, por Marcela Aravena, su supervisora de práctica, quien fue un pilar fundamental en el proceso.
El trabajo de la alumni de Psicología se llevó a cabo en el Centro de Salud Mental, donde le tocó atender a la población latina inmigrante. “Veía mucho la prevención de suicidios porque cumplía el rol de ser la primera persona que tenía contacto con los pacientes que entraban al centro para ser atendidos; luego, después de todo un levantamiento de sintomatologías, yo los derivaba a los terapeutas más óptimos”, explica Magdalena Blaitt.
Una de las cosas que más rescata la joven psicóloga de su práctica internacional, fue la importancia que se le da en Estados Unidos a la salud mental, específicamente en el estado de Colorado, donde se encuentra Denver, ya que en ese momento era una de las localidades que tenía mayor tasa de suicidios en el país. “En la organización donde trabajaba, hay un programa llamado “Cero Suicidio”, el cual hace referencia a que no se deben bajar las tasas, sino que se debe lograr que nadie más muera. Es bueno ver que existe una preocupación y que hay una inversión que funciona”, enfatiza.
Un día, mientras Magdalena conversaba con su compañera Pía Alarcón sobre las distintas cosas que estaba aprendiendo en el centro -como por ejemplo, la capacitación en primeros auxilios psicológicos, herramienta que sirve para calmar a una persona que sufra alguna crisis de ansiedad; además del uso de la tecnología como instrumento para medir niveles de ansiedad y otros tipos de sintomatologías-, ambas llegaron a la conclusión de que podrían hacer algo juntas cuando llegaran a Chile. Pero ninguna tenía muy claro cómo ni cuándo aplicarlo.
“Volvimos a Chile en febrero del 2020, en marzo defendí mi tesis y después comenzó la pandemia, en ese momento dije ‘chuta, qué hago’. Estaba recién titulada, con ganas de trabajar, pero era difícil encontrar trabajo. Entonces en vez de tomarlo como una frustración, con Pía nos hicimos el hábito de juntarnos todas las mañanas para formar los cimientos de nuestro emprendimiento y enfocarlo en mejorar la salud mental de los trabajadores”, comenta Magdalena Blaitt, quien junto a su socia concretaron la idea a mediados de ese mismo año bajo el nombre “4wellbeing” que, a través del proyecto “Prebien”, ofrece servicios de Prevención de Salud Mental relacionadas a la detección de ansiedad, depresión y diversas sintomatologías que podrían desencadenar en un eventual suicidio.
La alumni destaca que las habilidades obtenidas durante su práctica profesional no fueron las únicas herramientas que utilizó para crear su emprendimiento, ya que durante su etapa como alumna de la UDD aprovechó al máximo los ramos de emprendimiento y liderazgo, además de su participación en los programas Incuba y Acelera. “Fueron los motores que me impulsaron y que de alguna manera me enseñaron que lo podía hacer”, concluye.